octubre 8, 2025

La polarización reflota rumbo a la segunda vuelta, pero el desafío es tender puentes y no trincheras

Según un estudio, el 68,9 % cree que el país está polarizado, pero que se pueden resolver las diferencias pacíficamente.

La polarización dejó de ser abstracta y se siente en las calles, en los comentarios en las redes sociales y hasta en las charlas con la familia: erosiona amistades, divide opiniones y afecta la salud mental de las personas. Esta situación se profundiza en tiempos electorales, y más aún en balotaje, por lo que es importante encontrar maneras de mitigar su impacto.

La psicóloga política Ana Lucía Velasco explica que en tiempos de balotaje es por “naturaleza polarizante”, ya que las personas deben decidir por uno o por el otro candidato, en especial porque es una situación nueva para los bolivianos que por primera vez vivirán una segunda vuelta electoral.

“En Bolivia tenemos ahora un telón, o sea, estamos en un momento donde la moneda está en el aire. Ya estamos en un momento de transición, donde dependiendo de lo que hagan estos nuevos líderes en la política, podemos superar, tal vez, esta polarización crónica que estábamos viviendo”, señala Velasco.

En momentos de polarización, manifiesta el economista Iván Velásquez, que hay “una pérdida de la verdad común” y que se pretende deslegitimar la posición de la otra persona que piensa diferente y en muchas ocasiones se crean los bandos que piensan, por ejemplo, que es preferible volver a la República que vivir en Estado Plurinacional, la política de izquierda con la derecha, regionales como oriente versus occidente, étnicos como indígenas contra “blancos”.

“Destruye el tejido social y lo hemos visto, rompe familias, rompe comunidades, rompe regiones, genera enemistades. Por otro lado, paraliza la democracia, impide la creación y la implementación de políticas públicas que puedan buscar igualdad”, recalca Velásquez.

Datos de polarización

Un estudio Delphi de la Fundación Friedrich Ebert Stiftung (FES) publicado en julio de este año en el que se consulta a actores políticos, periodistas y analistas indica que un 16,4 % atribuye que la situación política del país es mala por la polarización ideológica. Además, un 68,9 % cree que el país está polarizado, pero que se pueden resolver las diferencias pacíficamente, mientras que un 21,9 % señala que por la fuerte fragmentación “el enfrentamiento es inevitable entre bolivianos”.

Según el informe, el tema que más polariza es la demanda de la candidatura del expresidente Evo Morales, seguido de la crisis económica y las elecciones generales en el país. Asimismo, el 62,2 % tiene una sensación de incertidumbre sobre el futuro de Bolivia en los próximos meses.